Hemos estado saltimbanqueado juntos desde hace un mes y medio, nos hicimos cómplices de aventuras, compañeros del viento que impactaba con fuerza contra su moto cada vez que salíamos a la ruta; entre confesiones, risas, porritos, he empezado a quererlo; extendí mi paciencia, para entender su alma libre, para mantenerme a su lado y aprender de él.
He intentado explicarle que me incomoda que sea tosco al hablar, su sarcasmo extremo y su falta de seriedad a la hora de concretar algún plan trazado por ambos; pero veo que mis esfuerzos han sido vanos.
Hace solo unos minutos entendí, que cuando me enamoro, la sensibilidad se apodera de mí; y que en ese estado no me será posible sobrellevar su humor negro.
No iré en contra de su naturaleza, no le pediré que cambie esto o aquello, no sería justo para él ni para mí.Yo lo quiero siempre libre, sonriente, jodido...lo quiero así...
¡Declinaré! Chau M. =(