La primera vez que estuvo frente a mí...
lunes, 31 de octubre de 2016
viernes, 28 de octubre de 2016
Una amiga.
Una amiga.
Una amiga que comparta mis alegrías y mis tristezas,
una amiga a quien llamar un viernes por la noche y le proponga salir por unas copas,
una amiga que sepa de mis amores catastróficos,
una amiga que ayude a disipar mis dudas,
una amiga que ingrese conmigo al campo de batalla y me ayude a lidiar con mis demonios más perversos.
Estoy bien conmigo misma, muchas veces esa amiga soy yo,
pero agradecería si existiera una fémina que me brinde su hombro,
para que pueda apoyarme en él cuando mis energías positivas escasean.
Extraño esa complicidad que compartía con Pamela,
aquella amiga, una amiga, que me acompañó durante los últimos dos años,
pero por cosas del destino ya no está más.
Una amiga que comparta mis alegrías y mis tristezas,
una amiga a quien llamar un viernes por la noche y le proponga salir por unas copas,
una amiga que sepa de mis amores catastróficos,
una amiga que ayude a disipar mis dudas,
una amiga que ingrese conmigo al campo de batalla y me ayude a lidiar con mis demonios más perversos.
Estoy bien conmigo misma, muchas veces esa amiga soy yo,
pero agradecería si existiera una fémina que me brinde su hombro,
para que pueda apoyarme en él cuando mis energías positivas escasean.
Extraño esa complicidad que compartía con Pamela,
aquella amiga, una amiga, que me acompañó durante los últimos dos años,
pero por cosas del destino ya no está más.
martes, 18 de octubre de 2016
¡Atrás Satanás!
Es increíble como la depresión se asoma disfrazada, a veces me tienta, hoy, por ejemplo, se me acercó y me invitó a abrazarla; pero emprendí el vuelo, decidida a que no me alcance nuevamente. Está de más decir que no quiero pensamientos autodestructivos en mi cabeza. es por eso que acabo de decidir, que el viernes cogeré mi mochila y me subiré al primer bus que vea y se dirija a Chanchamayo. Estoy segura que ahí no me encontrará, porque estaré siendo muy feliz =)
domingo, 16 de octubre de 2016
Ansiedad.
Me cansé de usar traje y estar detrás de un escritorio, de trabajar para quienes solo buscan figurar, de no perseguir mis sueños: hacer un mundo mejor. Quisiera correr por las praderas con ropa liviana y mis viejas compañeras All Star. No busco dinero, no busco posición, solo busco libertad y hacer cosas que realmente amo, como conversar, reír, bailar. No quiero ser un robot, que trabaja para gastar, y gasta para seguir trabajando.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)